miércoles, 29 de septiembre de 2010

Jhon Locke



Este destacado intelectual del siglo XVII fue un hombre muy completo. Estudió en la Universidad de Oxford, donde se doctoró en 1658. Si Bien su especialidad era la medicina, fue también filósofo, profesor de griego antiguo y economista. Además, ocupó cargos en la Cámara de Comercio y en el Ministerio de Hacienda de su país. De hecho, fue uno de los comisionados encargados del Comercio de Inglaterra con las colonias, un puesto de bastante rango que le dio, a través de diversas inversiones, una acomodada situación económica.
El acercamiento de Locke a los temas económicos fue un tanto curiosa: mientras era médico, un personaje llamado Anthony Ashley Cooper (que más tarde sería conde de Shaftesbury) concurrió a Oxford para tratarse una delicada enfermedad. Locke dirigió una complicada operación, que salvó la vida a Cooper. La amistad que entonces se generó entre ambos fue trascendental para la vida del autor, no sólo porque le permitió obtener varios cargos durante su vida, sino fundamentalmente porque cuando Ashley Cooper fue nombrado ministro de Hacienda, Locke realizó -en su nombre-un ensayo exponiendo sus criterios económicos sobre la Moneda y el interés. Este escrito, junto al resto de libros publicados por el intelectual, influiría profundamente en el futuro análisis de Adam Smith y del Liberalismo económico, especialmente por su irrestricto apoyo a la Propiedad privada.
Todas las publicaciones de Locke fueron tardías; de hecho, ninguno de sus escritos fue impreso antes de 1689, es decir, cuando él alcanzaba ya la edad de 57 años.
Al momento de morir, Locke era un hombre famoso y acaudalado, que no sólo gozaba de una alta reputación intelectual, literaria y política, sino también de una gran autoridad en materia económica.

Nicolas Maquiavelo

Nació en Florencia el 3 de mayo de 1469, hijo de Bernardo dei Niccolo Macchiavelli, jurisconsulto, y de Bartolommea dei Nelli, una dama muy bella e instruida. Físicamente era Nicolás Maquiavelo un hombre enjuto, de regular estatura y rostro anguloso, expresivo y sereno. Destacó como historiador y como filósofo político; sus escritos sobre política, convirtieron su nombre en un sinónimo de astucia y duplicidad. Maquiavelo trabajó como funcionario, empezando a destacar cuando se proclamó la república en Florencia en 1498. En 1502 contrajo matrimonio con Marietta Corsini, del cual nacieron cinco hijos. Fue secretario de la segunda cancillería encargada de los Asuntos Exteriores y Guerra de la república. Maquiavelo realizó así importantes misiones diplomáticas ante el rey francés (1504, 1510-1511), la Santa Sede (1506) y el emperador (1507-1508). En el transcurso de sus misiones diplomáticas dentro de Italia, conoció a muchos gobernantes italianos, y tuvo ocasión de estudiar sus tácticas políticas, en especial las del eclesiástico y militar César Borgia. Entre 1503 y 1506 Maquiavelo reorganizó las defensas militares de la república de Florencia. Sus actividades como embajador duraron hasta el año de 1512, en que empieza una época de persecuciones contra él, a causa de que los Médicis recuperan el poder en Florencia, desintegrándose la república, y privando a Maquiavelo de su cargo, fue encarcelado durante un tiempo y sometido al tormento por presunta conspiración. Cuando fue liberado se retiró a sus propiedades cercanas a Florencia, donde escribió sus obras más importantes. Distinguido tratadista y crítico militar, publicó obras muy notables, de las cuales destacan sus Discursos sobre la primera Década de Tito Livio y El Príncipe , siendo esta última, la obra fundamental del célebre secretario florentino, su índole moral es fundamentalmente recusable, al encerrar cuanto de filosofía práctica y reglas de gobierno podría apetecer cualquier jefe de Estado de cualquier tiempo dispuesto a no reparar en los medios para alcanzar sus fines. El Príncipe ha perdurado a través del tiempo, dando siempre lugar a las más encontradas opiniones. Al vivir Maquiavelo algún tiempo en la corte del duque Valentinois, pudo ver muchos hechos y actitudes que aprovechó para la composición de su libro. A pesar de sus intentos por ganarse el favor de los Médicis, nunca volvió a ocupar un cargo destacado en el gobierno. Cuando la república volvió a ser temporalmente restablecida en 1527, muchos republicanos sospecharon de sus tendencias en favor de los Médicis. Murió en Florencia, el 21 de junio de ese mismo año.

David Hume


 (Edimburgo, 7 de mayo de 1711 – Ibídem. 25 de agosto de 1776).   fue un filósofo, economista e historiador escocés y constituye una de las figuras más importantes de la filosofía occidental y de la Ilustración Escocesa.

Desde niño, mostró tener un talento por encima de los demás estudiantes de su edad y a los 12 años ingresa en la Universidad de su ciudad natal. Al cabo de dos o tres años dejó la carrera para estudiar Leyes y Comercio, que más tarde también abandonó para dedicarse definitivamente al estudio de la Filosofía en el Colegio de los jesuitas de La Fleche (Francia).

Gracias a su «History of England» (1754-1762), que tuvo en su tiempo gran aceptación, goza aún Hume de prestigio como historiador. Sin embargo, es más conocida e importante su faceta de filósofo, cuya teoría ha derivado en lo que hoy llamamos «humismo». Hume pretende ser el filósofo de la naturaleza humana, que se caracteriza fundamentalmente por la tendencia a formar hábitos; el aspecto cognitivo es, por tanto, menos importante que el práctico. No hay ningún conocimiento seguro si no se da en el marco de las percepciones reales, que son las que proporcionan las ideas y en general todo el raciocinio.

Sostiene Hume que el conocimiento humano es incapaz de avanzar si no es por medio de la experiencia; también las normas morales tienen como base la experiencia; la justicia, la religión, cualquier tipo de normas de conducta éticas o estéticas responden a un sentimiento de utilidad, modificándose según el tipo de sociedad y época en que se den.

«A treatise of human nature» («Tratado de la naturaleza humana») aparece en 1739-1940, primera obra sobre filosofía de Hume, en la que expone los principios fundamentales de la escuela empírica. A continuación publicó dos obras filosóficas: «An inquiry Concerning Human Understanding» («Investigacion sobre el conocimiento humano») (1748) y «An inquiry concerning the Principles of Moral» («Investigaciones sobre los principios de moral») en 1751. Otros trabajos forman un volumen de ensayos: «Political discourses» (1751), «Four dissertations» («Cuatro disertaciones») (1757)

Con Hume, el empirismo llega a la más radical de sus manifestaciones; en contra absolutamente de las tendencias racionalistas de su tiempo, y, en ese sentido, a pesar de las diferencias existentes, sin embargo, el sistema profundamente escéptico de Hume, llevado a sus últimas consecuencias, puede ser incluso negativo para el desarrollo de la ciencia. Niega cualquier tipo de conocimiento racional en sí mismo y toda impresión que podamos recibir en ese sentido debe considerarse como absolutamente errónea.